Podemos fijar el origen del mueble en el Antiguo Egipto ; aunque los restos de mobiliario de la época no son muy abundantes y corresponden casi en exclusiva a las clases más acomodadas. Los muebles egipcios se caracterizan por la sencillez en cuanto a la estructura; en cuanto a la decoración, los muebles los adornaban con formas geométricas en colores vivos. Se han encontrado arcones, lámparas, mesas y taburetes de esta época.
Unos siglos más tarde, el mueble dio un gran paso en su evolución en la Antigua Grecia. La filosofía tuvo una gran influencia en las piezas de esta época, aunque en un principio se adoptaron muchas de las directrices egipcias como por ejemplo el recubrimiento de madera con materiales más ricos como el metal o el marfil en los muebles de lujo. Una de las piezas que más evolucionó en la sociedad griega fue la cama; pasó de ser un simple montón de pieles a un bastidor con tiras de cuero entrecruzadas y un colchón.
Posteriormente, en el Imperio Romano, el mueble no evolucionó en exceso ya que los romanos eran muy austeros en la decoración de sus casas; preferían los ambientes diáfanos. El único hecho destacable de la época es la labor de los artesanos que comenzaron a tallar formas de animales en las patas; Los romanos sentían predilección por los taburetes, sillas y sillones.
En la Época Románica , los muebles se van adaptando a las necesidades de la sociedad, aunque continúan viéndose únicamente como piezas funcionales. Los muebles del Siglo XII se caracterizaban por ser fuertes y pesados decorados con pinturas de los códices y con aplicaciones de otros materiales como el hierro y el marfil.
A principios del Siglo XVI, comienza el estilo plateresco en cuanto a la decoración, el cual tiene una gran importancia en los palacios y edificios que se construyeron en esta época. Se comienza a prestar más atención a la ornamentación, en la que predominan los balaustres y los motivos vegetales. Poco a poco, la figuración es cada vez más abundante y ostentosa, con columnillas, dientes y frontones. Los materiales más utilizados en la época son el nogal, el boj y el hueso.
El Siglo XVII se caracterizó por una crisis general en Europa, azotada por el hambre, la miseria y la conflictividad política, social y religiosa. Aparecen por primera vez los motivos de gusto naturista y se continúan utilizando otros de estilo geométrico. El material predominante es el nogal macizo, aunque también se utilizan otros como el chapeado, así como la concha de tortuga y hueso en los muebles más exclusivos.
Y así hasta llegar a nuestros días. A raíz de la Primera Guerra Mundial, el holandés Gerrit Rietveld, construyó la famosa silla roja y azul, así como la silla zig-zag; fueron los primeros muebles vanguardistas.
El estilo art decó, comenzó en 1910 y tuvo su mayor agosto en 1925, año de la Exposición de Artes Decorativas e Industriales de París.
En cuanto al mueble moderno, cabe destacar que comenzó al principio del Siglo XX con un estilo simple y totalmente opuesto al ornamentado tradicional. Algunos de sus principales exponentes son el finés Aalvar Aalto y el danés Poul Henningsen.
Por último, el estilo de mueble contemporáneo que alcanzó su máxima cota entre los años 1940 y 1950 gracias a su estilo lleno de simplicidad y claridad. Su mayor referente es Ludwig Miles van der Rohe, quien realizó algunos diseños junto a la Escuela Bauhaus de Arte y Diseño en Alemania.